domingo, 30 de agosto de 2020

Hamburgo en un fin de semana



"Nuestro destino de viaje nunca es un lugar, sino una nueva forma de ver las cosas" 
Henry Miller



El viejo barrio de Speicherstadt se encuentra surcado por los canales del río Elba y unido por
un sinfín de puentes que unen los diferentes edificios de los antiguos almacenes. La visión que
tienes del barrio, paseando por el, nos remonta a una época donde el gran auge comercial
de la ciudad consigue darle un impulso urbanístico que marcará y definirá su
 propia identidad.





Conocer Hamburgo en el invierno del 2020, en una escapada de fin de semana, fue una experiencia muy enriquecedora, que desde luego la recomiendo al cien por cien.  La motivación inicial, cuando decides comprar el pasaje y te lanzas a un pequeño viaje, es sobretodo conseguir algún estímulo o alguna razón que despierte nuestra curiosidad, para que nos provoque un poco investigar, sobre la historia de ese sitio, las diferentes épocas por las que vas a poder descubrir la ciudad, sus influencias y sus transformaciones, y desde luego, un primer contacto siempre es un buen comienzo para entusiasmarse por el viaje, abrir bien los ojos y activar todos los sentidos para no perderse nada.

En esta ocasión iba a ser un viaje relámpago de tres días con mi amiga Luisi, estábamos muy ilusionadas pero desconocíamos por completo la pandemia que nos acechaba al volver, fue en febrero de 2020 y habíamos oído hablar de algunos casos de gripe en Wuhan... pero quedaba tan lejos que ni siquiera nos preocupamos.

Ahora pasado el tiempo, con otra perspectiva y después del periodo de confinamiento, he vuelto a recuperar las ganas de contar todo lo que aprendí y descubrí en ese viaje a Hamburgo.  Sobre todo por lo que me ha hecho reflexionar después del viaje, no sólo sobre la fragilidad de todo nuestro sistema, de nuestro mundo, si no también por todos los acontecimientos ocurridos después de volver. De Hamburgo me impresionó descubrir una ciudad llena de contrastes, con una historia interesante, una ciudad vibrante y rebosante de ideas, que ha integrado arquitecturas vanguardistas con sus antiguas edificaciones que reflejan su pasado marinero y mercantil. También Hamburgo destaca por tener una gran cantidad de museos, galerías de arte de renombre, teatros, clubs de música, grandes e importantes parques, un jardín botánico, dos lagos artificiales... y un sinfín de opciones interesantes, pero una de las curiosidades que más me llamó la atención fue descubrir que tiene un equipo de fútbol paradigmático, cuya historia y emblema hace referencia a su fundación como un club NO RACISTA y no fascista, más aún cuando, la muerte de George Floyd por la brutalidad policial en Minneapolis, nos ha sonrojado y nos ha interpelado como sociedad.

Ya os digo que fue un viaje que me impresionó mucho y espero que disfrutéis acompañándome en esta entrada, con un paseo fotográfico que muestra rincones de la ciudad que nos gustaron,  con algunas de las curiosidades que he podido descubrir, que seguro que hay muchas más..., pero desde luego espero, que con este recorrido personal de alguna manera consiga despertar la curiosidad y  motivaros  a hacer una escapada, para descubrir con vuestra propia mirada, esta interesante y vibrante ciudad con todas sus historias que nos harán conocer un poco más la ciudad de Hamburgo.




NUESTRAS VISITAS RECOMENDADAS:
. El barrio Speicherstadt (la ciudad de los almacenes)
. Elbphilharmonie (la Filarmónica del Elba)
. Hamburger Hafen (Puerto de Hamburgo)
. Navegar por el río Elba
. Elb-Tunnel (el Túnel del Elba) y Landungsbrücken
. Deichstrasse
. Las Iglesias de San Nicolás y San Miguel
. Ayuntamiento de Hamburgo (Rathaus)
. El Lago Alster  (Binnenalster)
En el próximo post:
. Fischmarkt (El Mercado del Pescado)
. El barrio de Sankt Pauli y su equipo de fútbol
. Beatles Platz

Speicherstadt


"Hamburgo está asentada en la unión de los ríos Elba, Alster y Billey, y cuenta con numerosos arroyos y canales, atravesados por unos 2.500 puentes, más que Londres, Àmsterdam y Venecia juntos. De hecho es la ciudad con más puentes en su término municipal, y más canales que los que suman Àmsterdam y Venecia."


Los edificios de ladrillo rojo del barrio de Speicherstadt (el nombre significa literalmente
"ciudad de almacenes") es un conjunto arquitectónico declarado Patrimonio de la UNESCO.

Todo el conjunto arquitectónico del barrio de Speicherstadt fue construido con un sistema revolucionario para su época, entre los años 1883 y 1927, pero se tuvo que paralizar en 1914 a causa de la Primera Guerra Mundial, con un sistema de pilotes de madera en unos edificios de varias plantas donde se podía acceder tanto desde tierra como desde el agua,  conectados por un sistema de puentes y plataformas elevadoras. Los barcos de mercancías podían acercarse  y descargar en los almacenes por un sistema de poleas. Los edificios servían de almacenes pero también como viviendas de los trabajadores.

El nombre de Hamburgo (Ham=significa orilla en la lengua antigua sajona) hacía referencia a su ubicación a la orilla del río y a su condición de ciudad estado, ciudad libre y hanseática, situada en el norte de Alemania. Pertenecía a la Liga Medieval Hanseática, y aún hoy mantiene en su escudo de ciudad, el castillo Hammaburg con las puertas cerradas, para simbolizar la soberanía de la ciudad.

De estilo neogótico, con los típicos ladrillos rojos, Speicherstadt se construyó con la idea de  que sirviera de almacén de zona franca para los productos importados sin costes de aduana. El auge del comercio de ultramar con las preciadas especias, el comercio del té, del café o  de  las alfombras del oriente, favoreció el crecimiento y el auge de toda esta zona.



Vista nocturna de Speicherstadt desde uno de sus puentes


Elbphilharmonie.  La Filarmónica del Elba
                                    
El emblemático edificio de la Filarmónica del Elba destaca como un faro contemporáneo

La Filarmónica del Elba se ha convertido en uno de los símbolos del Hamburgo más vanguardista y uno de los edificios más polémicos y controvertidos de los últimos años.  Fue construido sobre unos antiguos almacenes de cacao, café y tabaco junto al barrio de los almacenes Speicherstadt.

A parte de un ambicioso y carísimo proyecto, la Elbphilharmonie tiene tres salas de conciertos, un hotel de 5 estrellas, varios restaurantes y 45 apartamentos privados. Las salas de la Filarmónica de Hamburgo tiene uno de los espacios con mejor acústica del mundo y atrae a amantes de la música y de las artes de todo el mundo.

La arquitectura del edificio es una apuesta del equipo de arquitectos Herzog & de Meuron que han mantenido la base en ladrillo rojo, característico del barrio de los almacenes, y la parte superior en cristal que refleja el movimiento como una gran ola que desde lejos con los reflejos del cielo y el agua nos pueden parecer  velas en movimiento.

La entrada para ver el icónico edificio es gratuita (se tiene que sacar la entrada en las taquillas diciendo que es para ir a la "Plaza"), el interior del edificio es para fijarse en cada detalle,  lo primero es subir por la magnífica escalera mecánica de 85 mts y acceder a la "Plaza Pública" cerrada, con bares y restaurantes de acceso libre es una experiencia fantástica. Rodeando la Plaza se encuentra una terraza al aire libre que nos ofrece una visión de 360º de Hamburgo a 37 metros de altura. Os lo recomiendo.
                 

Elbphilharmonie destaca desde muchos puntos de ciudad




El hall de Elbphilharmonie

                                                                  



El puerto de Hamburgo

El Puerto de Hamburgo es el segundo puerto más grande de Europa después del de
 Róterdam y lo curioso es que es un puerto fluvial de gran calado en el río Elba.

El puerto de Hamburgo, también se conoce como "la puerta de Alemania al mundo", se encuentra ubicado en una bahía en la desembocadura del río Elba a unos 100 km de las aguas bravas del Mar del Norte, en una situación muy estratégica para el comercio tanto marítimo como terrestre, con unas aguas profundas y de gran calado que facilitan el tránsito de los barcos, con una infraestructura moderna que se apoya en los canales e islas del río y una logística eficiente que ha conseguido conectar con las más importantes rutas internacionales del comercio.
                             
Las líneas de los Ferries que recorren los canales es una buena opción para ver Hamburgo
desde otra perspectiva y ver la fachada marítima. 
 


Dicen sobre el puerto: "La Hafen City de Hamburgo se ha convertido en un modelo para la transformación de las zonas centrales de las antiguas ciudades europeas.  Una idea de urbanidad que contempla una alta proporción de espacios libres en contacto con el agua, con paseos junto a la costa, parques y plazas integradas dentro de las distintas secciones o vecindades en las que se ha dividido el conjunto."

"Hafen City ha integrado también a la investigación y al tercer sector con la generación de espacio universitario en la denominada Universidad Logística Kühne y la integración de las oficinas principales de Greenpeace para el Báltico."

Navegar por el río Elba

Navegar por el río Elba es una experiencia altamente recomendable, consigues distanciarte un poco de los muelles, con cualquiera de las rutas de los Ferries, descubriendo la grandiosidad del puerto y del río, te haces un poco la idea de la geografía de Hamburgo con la cantidad de islas y canales, desde una posición lejana tienes enfrente una panorámica del skyline de la ciudad de Hamburgo. Nosotras hicimos varias rutas en distintos ferries, a pesar del frío de febrero en Hamburgo.  Recomendable es la línea número 62 que se coje en el embarcadero 3, el viaje dura unos 45 minutos y cuesta unos 3 euros ida y vuelta.

Por los alrededores de los muelles y del puerto hay una gran variedad de restaurantes y bares que ofrecen comida autóctona destacando sus platos de pescados, de mariscos y sus variedades de cervezas artesanas.                    
          



Elb-Tunnel

Visitar el antiguo túnel del río Elba es una de nuestras recomendaciones en Hamburgo, porque es una de las obras de ingeniería más importantes de principios del siglo XX. Aunque a primera vista podría carecer de interés, bajar por sus impresionantes escaleras, ver las fotografías de la ejecución de la obra y subir en los ascensores para vehículos... es entre algunas cosas más una experiencia muy estimulante, además al atravesar sus 430 metros de longitud, otro lado del túnel, podemos tener una bonita panorámica de la ciudad desde el otro lado del río.

Elbtunnel empezó a construirse en 1907 a 25 metros por debajo del río Elba para conectar las dos orillas y se consiguió terminar en 1911. Es un túnel para vehículos y peatones, tiene 4 ascensores para vehículos a motor, que los fines de semana se pueden utilizar los peatones y son muy curiosos.

La entrada para peatones y ciclistas es gratuita, está siempre abierta y el coste para los vehículos es de 2 euros. La entrada al Túnel se encuentra en el puerto de Hamburgo, al lado de la parada de metro de Landungsbrücken.


Foto del Túnel del Elba



Deichstrasse

Pasear por los alrededores de la calle Deichstrasse, situada entre la Iglesia de San Nicolás y el puerto, y acercarse a contemplar alguna de las viviendas de esta calle es acercarse a la vida en Hamburgo alrededor de los siglos XVII al XIX, cuando el auge del comercio dejó una impronta muy personal en esta ciudad. Algunas de estas fachadas de estilo neerlandés se conservan como antaño, con algunas de sus peculiaridades de la época en que se construyeron y nos muestran cómo tenían que vivir adaptándose a los terrenos pantanosos e inundables del lugar. Son de las viviendas más antiguas que quedan en pie del antiguo distrito portuario, incluso se encuentra el almacén más antiguo construido en 1780.

Por esta calle hay varios restaurantes donde puedes degustar platos típicos de la gastronomía alemana.
      
Vista de la calle Deichstrasse desde uno de los puentes que cruzan el canal.
                                             
En los edificios se puede observar la huella que deja la subida de la marea y podemos ver
las estructuras de grúas y poleas para acceder las mercancías a las viviendas.
Muchas de las viviendas se deterioraron con los bombardeos de la II Guerra Mundial pero se
mantuvieron en pie y han sido rehabilitadas.


Iglesia de San Nicolás y de San Miguel


                                


La Iglesia de San Nicolás o St.-Nikolai-Kirche se ha convertido en un monumento conmemorativo con gran interés arquitectónico que se ha conservado casi en ruinas para poner en valor la memoria histórica de Alemania, para no olvidar la destrucción y horror que provocan las guerras. La Iglesia fue bombardeada y seriamente dañada por los bombardeos continuados a la ciudad de Hamburgo en la II Guerra Mundial.

La construcción de la primera capilla dedicada a San Nicolás, patrón de los marineros, comenzó en el siglo XII a orillas del río Alster, posteriormente se construyó un edificio característico del norte de Alemania con el estilo del gótico báltico. A través del tiempo, y después del gran incendio de 1842, quedó muy dañada. Hubo un momento, entre los años 1874 al 1876 que fue el edificio más alto del mundo, hoy en día es el segundo edificio más alto de Hamburgo.

Desde hace unos años se instaló una plataforma, un ascensor, que nos eleva a unos setenta metros de altura a la torre de la aguja, desde donde podemos tener una vistas impresionantes  de toda la ciudad de Hamburgo. También podemos acceder al museo, que como un centro de interpretación, nos muestra las imágenes de la guerra, de los bombardeos y de la historia de la Iglesia.

Vista panorámica de la ciudad desde la torre de la Iglesia de San Nicolás

Desde la torre del campanario se pueden observar los edificios más emblemáticos de la ciudad

Vista desde San Nicolás, a lo lejos se puede ver la Torre del Reloj de la Iglesia de San Miguel.

La Iglesia de San Miguel, también conocida como Miguelito por los hamburgueses, es una réplica del edificio neobarroco construido en siglo XVII que fue destruído en un incendio en 1906. Es una de las cinco principales iglesias protestantes de Hamburgo y muy querida por sus ciudadanos, es uno de los símbolos de la ciudad.

Situada muy cerca del puerto, su torre del reloj, el reloj más grande del país, a 132 metros de altura, servía de guía a los barcos porque se divisaba desde lejos. Se puede acceder a lo alto de la torre con un ascensor y tiene unas vistas magníficas de la ciudad y del puerto.
                                                         
Iglesia de San Miguel

El puente de Brooksbrücke, uno de tantos hermosos puentes que cruzan los canales, se encuentra
frente al museo de Miniatur Wunderland. El puente actual data de 1800 y se encuentra presidido
por cuatro figuras importantes una de ellas es el Emperador Barbarossa. El Emperador, en 1189,
obtuvo el privilegio de recaudar aranceles en el Elba y se convirtió en 
Ciudad Libre Imperial



Ayuntamiento de Hamburgo (Rathaus)


En la magnífica plaza de Rathausplatz destaca el edificio neorrenacentista del Ayuntamiento de Hamburgo Rathaus. La plaza y el edificio, que es una joya arquitectónica, es uno de los imprescindibles del viaje. El edificio del Ayuntamiento fue construido entre 1886 y 1897 para sustituir al antiguo edificio del ayuntamiento que fue destruído por el gran incendio de 1842 que arrasó gran parte de la antigua ciudad. 

Es el edificio del Ayuntamiento más grande de Alemania y fue financiada por los ricos comerciantes de la época para reflejar el poder, la independencia y la prosperidad de la ciudad. Se encuentra situado en el barrio de Altstadt en el centro de la ciudad, cerca del Lago Alster y la Estación Central. Frente al Ayuntamiento se encuentra la Plaza del Mercado (Rathausmarkt) y en la parte trasera se encuentra el edificio de La Bolsa.

Todo el edificio merece una visita, mejor si puede ser guiada, por los innumerables detalles arquitectónicos y alegóricos que nos invitan a descubrir algunos de los acontecimientos históricos de la ciudad. Sus estancias, su torre de 112 metros de altura, su superficie y el número de habitaciones supera a las del Palacio de Buckingham.

Nosotras comimos en el restaurante que hay en el interior y nos gustó muchísimo, muy buena relación calidad-precio y entre semana tienen un menú muy apetecible.



En el Patio Central del edificio del Ayuntamiento se encuentra presidido por una fuente cuya 
representación principal es la de la diosa de la mitología griega "Higía", diosa de la salud,
de su nombre viene "higiene", y fue erigida en recuerdo de la epidemia de cólera de 1892.


El Lago Binnenalster

Uno de los dos lagos artificiales que tiene la ciudad de Hamburgo es el Lago Binnenalster o lago interior del Alster. Se encuentra cerca del Ayuntamiento y de la Estación Central y es una de las zonas más visitadas, sobre todo en verano, por los turistas y también por sus ciudadanos para hacer deportes o simplemente navegar con alguno de los cruceros que cruzan el lago.

Su nombre, lago interior del Alster, hace referencia a que se encuentra ubicado en el interior de lo fueron las antiguas murallas de Hamburgo, ahora esas murallas ya no están pero podemos imaginar la vieja ciudad fortificada, el Lago fue construido en sus inicios como un embalse para el molino del burgo.

Binnenalster o Lago Alster


Os dejo para tomar un tentempié para coger fuerzas y seguir... en el siguiente post os contaré una de las experiencias que no os podéis perder si viajáis a Hamburgo en fin de semana.